Cuatro congresistas fueron investigados por presuntamente convertir fondos de campaña para uso personal.
El Comité de Ética de la Cámara de Representantes anunció el 30 de diciembre que cerrará sus investigaciones sobre el uso de fondos de campaña por parte de cuatro congresistas.
La Oficina de Ética del Congreso (OCE) había remitido a los representantes Sanford Bishop (D-Ga.), Wesley Hunt (R-Texas), Ronny Jackson (R-Texas) y Alex Mooney (RW.Va.) al comité de Más investigación posteriormente de encontrar razones para creer que los legisladores pueden sobrevenir convertido fondos de campaña para uso personal.
A posteriori de encontrar evidencia en algunos casos de incumplimiento de las reglas de la Cámara con respecto a la presentación de informes y el uso personal de los fondos de campaña, el panel finalmente determinó que no había “pruebas de que algún miembro haya hecho un mal uso intencional de los fondos de campaña para su beneficio personal”, según un comunicado.
El panel no especificó qué miembros de la Cámara violaron las reglas de la Cámara. Observó que los legisladores pertinentes habían recibido orientación actualizada sobre esas reglas y las conclusiones del comité con respecto a su actividad de campaña.
“El Comité no tomará más medidas en esos asuntos y los considerará cerrados”, dijo el panel.
La atrevimiento de cerrar las investigaciones, yuxtapuesto con “otros asuntos confidenciales”, fue coincidente.
La ley federal de financiación de campañas igualmente prohíbe el uso personal de los fondos de campaña.
Cada uno de los cuatro legisladores en cuestión fue perceptible de utilizar fondos de campaña para gastos personales y dos de ellos enfrentaron acusaciones adicionales.
En el caso de Bishop, que el comité investigó durante casi cinco abriles, igualmente hubo un propaganda de que gastó una parte de su Asignación de Representación de Miembros (MRA) para regir su oficina en las celebraciones navideñas anuales.
Asimismo, Mooney fue perceptible de autorizar gastos inadmisibles en la ARM. Otras acusaciones en su contra incluyeron afirmaciones de que utilizó posibles oficiales para trabajos de campaña y diligencias personales; aceptó obsequios no permitidos, incluido un delirio a Aruba y alojamiento y espacio para eventos gratuitos; e “información retenida, ocultada o falsificada” durante la investigación del comité.
“Bajo ninguna circunstancia los miembros podrán convertir fondos de campaña para uso personal para ellos mismos o para cualquier otra persona”, señala el memorando.
“Los fondos de la campaña no se pueden utilizar para mejorar el estilo de vida de un individuo, para disfrute o entretenimiento personal, ni para remunerar las obligaciones personales de un individuo. Los miembros siquiera podrán tomar prestados fondos de campaña ni prestarlos a nadie para fines personales”.
El memorando igualmente recuerda a los miembros que mantengan registros detallados de sus gastos de campaña “durante al menos tres congresos” para certificar que sean verificables.