Cada vez está más distante la posibilidad de concertar el ajuste del salario insignificante para el año 2025 en Colombia. Hoy las centrales obreras, que representan a los trabajadores, revelarán una propuesta del 10% o más, mientras que los empresarios abogan paraque sea de un dígito, cercano al 6%.
caterin0506@gmail.com
@cate_manchola
En un condición de poco consenso, hoy se reunirá nuevamente la Comisión Permanente de Concertación de Políticas Salariales y Laborales, que congrega al Gobierno Franquista, empresarios y sindicatos, para concretar de cuánto será el encarecimiento del salario insignificante para el 2025.
Fabio Arias Giraldo, Presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) Colombia, le dijo a LA NACIÓN que, sin duda, la propuesta por parte de los sindicatos sobre “esa signo será de dos dígitos; nosotros vamos a durar de guisa unificada a esa propuesta”, aseguró. “Vamos a esperar a la reunión del miércoles (hoy), para ver qué hacemos, pero partimos del hecho de que no habrá acuerdo. Doy por sentado que no hay acuerdo”.
El sindicalista criticó que en abriles anteriores los empresarios no han revelado una propuesta de ajuste y podría retornar a suceder lo mismo, por otra parte, durante la presente negociación, los empleadores se han concentrado en hacer reparos al número de productividad. “Significa que al igual que en los dos periodos anteriores, no quieren negociar. Ellos no quieren acercarse a ninguna signo, porque ellos del 6% no van a tener lugar”.
“Obviamente que tal y como se vienen comportando los empresarios, no hay forma de durar a un acuerdo. Ellos pusieron en sospecha las cifras que presentó el Dane en materia de productividad, cuando es con la metodología que ellos han defendido históricamente, ellos están tratando de aseverar, ‘nosotros no aceptamos esas cifras’. Por tal motivo, ¿qué posibilidad de negociación puede favor si ni siquiera aceptan las cifras que ayer les parecían muy chéveres?”, cuestionó.
Y contextualizó que en la reunión del pasado lunes, el Dane presentó todos los datos de inflación, divididos por territorios e ingresos. El Empleo de Hacienda dio a conocer sus variables macroeconómicas, donde se indicó que “al gobierno no le estaba yendo tan mal”. Y el Sotabanco de la República reiteró el número de la inflación (5,2%) y las perspectivas con destino a el futuro. “Nosotros le recriminamos al Sotabanco de la República cómo están las tasas de interés”, anotó Fabio Arias Giraldo, presidente de la CUT.
Para el sindicalista un aumento de dos dígitos, es aseverar igual o superior al 10%, “beneficia al país impávido: primero a los trabajadores y segundo a los empresarios”. Pues, de esa guisa las familias demandarán más beneficios y servicios, lo cual desde su visión se traduce en reactivación económica. “Es cierto que los ingresos son un cifra de reactivación, eso lo ha demostrado, incluso, el Sotabanco de la República”, aseguró.
Un ajuste del 10% equivale a $130.000, pasaría de $1.300.000 a $1.430.000 (sin auxilio de transporte).
Las condiciones
Varios aspectos son cruciales a la hora de concretar cuál será el aumento del salario insignificante mensual y uno de ellos es el Índice de Precios al Consumidor -IPC, que mide la inflación. El salario insignificante no puede crecer por debajo de la inflación causada. Por eso, para el 2024 se ajustó en un 12,07%, pasando de $1.160.000 a $1.300.000; adecuado en gran parte a este indicador.
El exministro Ricardo Bonilla enunció ayer de comenzar la negociación que la cojín del ajuste del insignificante sería del 6,2%, teniendo en cuenta proyecciones en la inflación, la productividad y otras cifras claves. Equivale a un aumento de $80.600, pasaría de $1.300.000 a $1.380.600.
Mientras que para Fenalco, necesariamente el ajuste “no puede durar a dos dígitos; tiene que estar mucho más cerca de la inflación en esta oportunidad”, dijo Jaime Alberto Justo, presidente del sindicato. Desde su perspectiva, “en abriles anteriores se ha sido supremamente productivo”, y detalló que según el Sotabanco de la República ha habido un crecimiento vivo del 3,8% en el insignificante para el 2023 y del 5,1% para el 2024. La reforma profesional que cursa trámite en el Congreso de la República es otro de los temas que alertan a los empresarios.
Las alertas
El Centro de Estudios Económicos – Anif, consideraba el dos de diciembre, ayer de conocer el número de productividad e inflación, que el salario insignificante para 2025 no debería aumentar más de 6%. “Aumentos por encima del 6% no solo no están justificados por los fundamentales económicos, sino que pueden seguir ampliando la brecha entre los trabajadores formales y aquellos excluidos de dicha formalidad”, advirtió.
Igualmente señaló que según el Dane, en lo corrido de 2024 el 56,0% de los ocupados se encuentran en la informalidad, “quedando excluidos de los beneficios de las negociaciones del salario insignificante”. Reafirmó que “si acertadamente esta medida exploración beneficiar a los trabajadores, paradójicamente desconoce a la mayoría de los trabajadores en la informalidad y profundiza los desafíos estructurales del mercado profesional colombiano”.
Por su parte Aliadas, una alianza entre asociaciones y gremios del país, ha mencionado la importancia de perseverar “coherencia y responsabilidad” con las realidades del mercado profesional colombiano, argumenta que un “incremento grande no sólo puede originar limitaciones en puestos de trabajo, aumento de la informalidad, sino asimismo presiones a la demanda con género sobre el incremento militar de precios”.