‘Este ha sido un gran delirio. Simplemente satisfecho de mucho inclinación, aprecio y alegría”, dijo Sam Brown.
Dos demócratas y un republicano tienen pequeñas ventajas en las únicas elecciones al Senado de Estados Unidos que aún no han sido convocadas.
El diez por ciento de los distritos aún no han informado resultados.
“Hemos tenido equipos aquí durante la tinieblas, prácticamente las 24 horas del día para procesar todas las boletas por correo”, dijo a los periodistas Lorena Portillo, registradora de votantes del condado de Clark, en una puesta al día el miércoles.
Reb. Rubén Gallego (D-Ariz.) tiene la superioridad sobre la republicana Kari Lake en la carrera para suceder a la senadora Kyrsten Sinema (I-Ariz.), ex demócrata. Lake se postuló para administrador en 2022 y perdió.
Gallego ha recibido 1,23 millones de votos frente a los 1,18 millones de votos de Lake, con el 69 por ciento de los distritos electorales informados. El postrero conjunto de boletas del condado de Maricopa se inclinó sutilmente a gracia de Gallego.
En Pensilvania, el republicano Dave McCormick tenía una ligera superioridad con el 48,9 por ciento de los votos. Está desafiando al senador Bob Casey (D-Pa.), quien recibió el 48,5 por ciento de los votos y el 2 por ciento de los distritos electorales aún no informan.
La campaña de Casey dijo en un comunicado la alba del miércoles que confía en que el titular prevalecerá una vez que se cuenten todos los votos.
El presidente electo Donald Trump ha sido evidente campeón de Pensilvania.
Se realizarán recuentos automáticos en Arizona y Pensilvania si los márgenes finales son menores o iguales al 0,5 por ciento del número de votos emitidos para los dos candidatos. Nevazón no tiene recuentos automáticos, pero un candidato puede solicitar un recuento sin beneficio requerido.
Los republicanos ya han ansioso el control del Senado a los demócratas posteriormente de cambiar escaños en Montana, Ohio y Virginia Occidental sin perder ningún escaño.