El coronel de la Fuerza Aérea estadounidense Matthew McCall concluyó que el secretario de Defensa, Lloyd Austin, no tenía autoridad clara para revocar los acuerdos de testimonio de culpabilidad con tres acusados del 11 de septiembre.
Un magistrado marcial ha revivido una serie de acuerdos de testimonio de culpabilidad para tres acusados que están siendo juzgados por los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, posteriormente de que el Secretario de Defensa, Lloyd Austin, interviniera previamente para circunvalar los acuerdos de testimonio de culpabilidad.
Los acusados están acusados de conspiración, ataque a civiles, causar intencionalmente lesiones corporales graves, homicidio en violación del derecho de la pugna, secuestro o puesta en peligro de un barco o avión, y terrorismo en un ataque en suelo estadounidense que mató a casi 3.000 personas y dejó muchas más. herido. Los acuerdos de testimonio de culpabilidad evitarían a los acusados el aventura de la pena de asesinato a cambio de sus declaraciones de culpabilidad.
McCall concluyó que Austin no tenía autoridad clara para retirar el acuerdo de culpabilidad según su memorando del 2 de agosto.
“La autoridad para retirarse pertenece exclusivamente a la autoridad convocante y no está sujeta a ninguna límite que pueda prescribir el Secretario. El Secretario de Defensa no pretendió convertirse en la autoridad convocante para este caso”, escribió McCall.
McCall concluyó encima que incluso si Austin se hubiera reservado claramente la autoridad para atreverse si la fiscalía podía celebrar un acuerdo previo al sensatez con los acusados, los acusados ya habían comenzado a cumplir las condiciones del acuerdo previo al sensatez cuando Austin intervino para retirar el acuerdo.
“Si un acentuado comienza a cumplir los términos de un PTA (acuerdo previo al sensatez), la autoridad convocante pierde el derecho a retirarse del acuerdo”, escribió el magistrado marcial.
Aún no está claro si el gobierno estadounidense apelará el defecto de McCall.
The Epoch Times se puso en contacto con la oficina de Austin para solicitar comentarios, pero no recibió respuesta al momento de la publicación.
Si admisiblemente las familias de algunas de las víctimas y otras personas insisten en que los procesamientos del 11 de septiembre deben continuar hasta el sensatez y con la posibilidad de la pena de asesinato, los casos han sufrido primaveras de demoras y desafíos legales.
Si los casos del 11 de septiembre superan la grado de sensatez y sentencia, el Tribunal de Apelaciones de Estados Unidos para el Circuito del Distrito de Columbia probablemente escuchará muchas impugnaciones a medida que los acusados apelen cualquier sentencia de pena de asesinato.
Las apelaciones podrían centrarse en la supuesta destrucción por parte de la CIA de las imágenes de los interrogatorios y en el valor en que las denuncias de tortura de los acusados afectan la admisibilidad de las pruebas en su contra. Las apelaciones además podrían afrontar si el memorando de Austin del 2 de agosto constituyó una interferencia indebida en el procesamiento.
La Associated Press contribuyó a este artículo.