Un suspensión funcionario de la sucursal Trump ha acreditado a los agentes de inmigración a realizar resolución en escuelas e iglesias.
La secretaria interina de Seguridad Franquista, Benjamine Huffman, emitió el lunes una directiva que anula las directrices que prohibían a los agentes federales arrestar a inmigrantes ilegales en los llamados lugares sensibles, incluidas escuelas, iglesias y bancos de alimentos.
“Podemos cumplir nuestra encomienda de hacer cumplir la ley sin desmentir o acotar el ataque de las personas a la atención médica necesaria, el ataque de los niños a sus escuelas, el ataque de los desplazados a alimentos y refugio, el ataque de las personas de fe a sus lugares de culto y más”, dijo entonces Homeland. dijo en ese momento el secretario de Seguridad, Alejandro Mayorkas.
Las directrices cubrían a los funcionarios de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) y del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), entreambos internamente del Área de Seguridad Franquista.
Una segunda directiva detuvo el uso generalizado de la familiaridad condicional humanitaria, que la sucursal aludido había utilizado para millones de inmigrantes ilegales. La familiaridad condicional ahora se concederá caso por caso, dijeron las autoridades.
Tom Homan, zar fronterizo del presidente Donald Trump, dijo el martes que las operaciones de deportación ya comenzaron.
‘Revolución del sentido popular’
Trump ha prometido resistir a angla deportaciones masivas de inmigrantes ilegales. Posteriormente de admitir el cargo el lunes, firmó múltiples órdenes ejecutivas relacionadas con la inmigración, incluida la revelación de una emergencia franquista en la frontera entre Estados Unidos y México y la ilustración de que la política estadounidense tiene como objetivo preparar la entrada ilegal, expulsar a todos los inmigrantes ilegales y presentar cargos penales contra quienes faciliten la entrada ilegal. su presencia.
“Con estas acciones, comenzaremos la restauración completa de Estados Unidos y la revolución del sentido popular”, dijo Trump en su discurso inaugural. “Se detendrá inmediatamente toda entrada ilegal y comenzaremos el proceso de devolver a millones y millones de extranjeros delincuentes a los lugares de donde vinieron”.
Los defensores de la inmigración han criticado al presidente por sus acciones relacionadas con la inmigración.
Los grupos que apoyan la traba de la inmigración ilegal, por otro costado, respaldaron las medidas.