La Corte Suprema de Rectitud, en la investigación que adelanta por el escándalo en la UNGRD, señaló que Carlos Ramón González, exdirector del Dapre, habría poliedro instrucción de desviar dineros de la entidad.
Redacción Web/LN
El desfalco de la Pelotón Doméstico de Gobierno del Peligro y Desastres (UNGRD), al parecer, fue consumado. Así lo demuestra la ponencia del magistrado Francisco Farfán, ingrediente de la Corte Suprema, por la que se abrió investigación formal contra los expresidentes del Congreso Iván Name y Sneyder Pinilla.
El documento detalla que desde el mes de septiembre de 2023, presuntamente se reunieron todos esos funcionarios con los exdirectores de la UNGRD, Olmedo López y Sneyder Pinilla, para apropiarse de los capital de la entidad, entre otras cosas, para sobornar congresistas a cambio de que ayudaran en la aprobación de las reformas legislativas presentadas por el Gobierno Petro, para modificar el Sistema Pensional y el Sistema de Sanidad.
‘Salpicado’ González
Entre esos dineros, habrían desencajado los 3.000 millones de pesos para el expresidente del Senado, Iván Name; y 1.000 millones de pesos para el entonces presidente de la Cámara, Andrés Calle.
Sobre ese supuesto soborno, la ponencia del magistrado Farfán da un detalle persuasivo: “La entrega del peculio a los referidos miembros del Congreso de la República, la habría efectuado Sneyder Pinilla por orden de Olmedo López, y siguiendo este final, instrucciones de altos funcionarios del Gobierno Doméstico, entre estos, de Carlos Ramón González, el director del Área Oficial de la Presidencia de la República (DAPRE)”.
Los argumentos del togado se basaron en las explosivas confesiones que hizo Sneyder Pinilla y Olmedo López, exdirectores de la UNGRD, y las cuales dejaron serías advertencias de la Corte como que los hechos de corrupción sí se habrían presentado. Las pruebas en el interior de este expediente vinculan al exdirector del Dapre y el DNI, Carlos Ramón González, y la exconsejera para las Regiones de la Presidencia, Sandra Ortiz.