“Los franceses quieren y necesitan ecuanimidad fiscal”, señaló Michel Barnier tras su nuevo nominación, buscando la forma de tapar el adeudamiento presupuestario de Francia.
El nuevo primer ministro de Francia, Michel Barnier, planteó el domingo la posibilidad de aumentos de impuestos para los individuos ricos y las grandes corporaciones.
Habló posteriormente de la presentación de un nuevo gobierno de derecha el sábado, una atrevimiento que se produjo casi tres meses posteriormente de las elecciones anticipadas de Francia.
“No voy a aumentar más los impuestos a todos los franceses, ni a los más modestos, ni a los que trabajan, ni a las clases medias. Pero no puedo excluir a los más ricos del esfuerzo doméstico para remediar la situación”, declaró Barnier a la sujeción de televisión France 2.
Barnier se refería a una serie de problemas económicos heredados del gobierno preparatorio, específicamente una pesada carga de deuda.
El adeudamiento presupuestario sigue siendo elevado
El adeudamiento presupuestario de Francia ascendió al 5,5% de la producción económica en 2023, muy por encima del objetivo del gobierno del 4,9% y del meta de la UE del 3%.
Este año, se proyecta que el adeudamiento del sector conocido francés trascendencia en torno a del 5,6% del PIB y supere el 6% en 2025.
El exceso de presupuesto, impulsado en parte por el bajo crecimiento y la reducción de los ingresos fiscales, ya ha provocado procedimientos disciplinarios por parte de la UE.
Encima, la agencia de calificación S&P rebajó la nota crediticia de Francia a finales de mayo.
Esta fue la primera vez que la calificación de Francia cayó desde 2013.
“Una gran parte de nuestra deuda ha sido colocada en los mercados internacionales y extranjeros. Tenemos que amparar la credibilidad de Francia”, advirtió Barnier el domingo.
A principios de este mes, ya había afirmado que Francia necesitaba más “ecuanimidad fiscal”.
Los críticos de Barnier han amenazado con emitir votos de censura contra el nuevo gobierno, ya que muchos argumentan que la votación derechista del presidente Macron para primer ministro no refleja los resultados de las elecciones de julio.
Resistor genérico a las subidas de impuestos
En la votación, la alianza izquierdista Nuevo Frente Popular (NFP) obtuvo el veterano porcentaje de apoyo, aunque ningún partido logró consolidar una mayoría absoluta.
La perspectiva de subidas de impuestos todavía resulta incómoda para quienes pertenecen al propio edicto de Macron.
La semana pasada, cuando la sugerencia llegó a los titulares, el ministro del Interior sustituto, Gérald Darmanin, dijo a France 2: “Para nosotros está fuera de cuestión unirnos a un gobierno o apoyar a un gobierno que aumenta los impuestos”.
El ex primer ministro Gabriel Attal, que ahora es presidente de los diputados del Renacimiento de Macron en la Asamblea Doméstico, dijo al revista Le Point que “luchará… para proteger a los franceses de los aumentos de impuestos”.
Para respetar los plazos franceses y comunitarios, Barnier debe presentar un presupuesto para el próximo año antaño del 1 de octubre.
A la luz de las fracturas políticas, parece cada vez más improbable que se cumpla este plazo.