Microsoft evaluó que un orden de piratas informáticos vinculado a Irán tuvo como objetivo una campaña presidencial de Estados Unidos.
El FBI ha iniciado una investigación sobre informes que indican que piratas informáticos, posiblemente vinculados a Irán, podrían activo atacado la campaña del expresidente Donald Trump.
El FBI confirmó, en un comunicado enviado por correo electrónico a The Epoch Times el 12 de agosto, que actualmente está investigando el supuesto ataque informático. No ofreció ningún comentario adicional sobre las acusaciones de piratería.
Cheung ofreció a Politico pocas pruebas específicas de que la campaña de Trump fuera el objetivo de esta operación de piratería informática. En sus comentarios, Cheung destacó que la supuesta violación de la seguridad cibernética coincide con otros informes recientes de que Irán tiene a Trump en la mira. Irán ha prometido perseguir al expresidente por ordenar un ataque con drones el 3 de enero de 2020 que mató al militar Qassem Soleimani del CGRI.
Según Politico, Cheung se negó a opinar si la campaña de Trump había estado en contacto con Microsoft o con las fuerzas del orden sobre las acusaciones de ciberseguridad.
The Epoch Times contactó a Cheung para obtener más detalles sobre la evaluación de ciberseguridad de la campaña.
Politico informó que un individuo que se identificó como “Robert” se había puesto en contacto con ellos a través de Internet y que transmitió lo que parecía ser una comunicación interna de un detención funcionario de la campaña de Trump. Entre los documentos había un expediente de investigación de 271 páginas sobre el senador J. D. Vance (republicano de Ohio), a quien Trump eligió como su compañero de fórmula el mes pasado.
Según se informa, “Robert” rechazó las preguntas de Politico sobre cómo llegó a poseer las comunicaciones, afirmando: “Le sugiero que no sienta curiosidad por memorizar de dónde las obtuve. Cualquier respuesta a esta pregunta me comprometerá y todavía le restringirá legalmente la publicación de las mismas”.
Politico no declaró explícitamente si cree que “Robert” tenía alguna conexión específica con las acusaciones de piratería.
El mes pasado, la Oficina del Director de Inteligencia Franquista publicó una evaluación de la comunidad de inteligencia, en la que se llega a la conclusión de que los grupos iraníes están trabajando para fomentar la desconfianza alrededor de las instituciones estadounidenses y aumentar la discordia social. La evaluación afirma que los grupos iraníes utilizan “vastas redes de personajes en orientación y molinos de propaganda para difundir desinformación y han estado notablemente activos en la agudización de las tensiones sobre el conflicto entre Israel y Lazada”.
El referencia de la comunidad de inteligencia afirma encima que Teherán está “trabajando para influir en las elecciones presidenciales, probablemente porque los líderes iraníes quieren evitar un resultado que perciben que aumentaría las tensiones con Estados Unidos”.
La representación iraní frente a las Naciones Unidas ha inepto las acusaciones de billete de Teherán en una violación cibernética dirigida a la campaña de Trump.
La representación iraní insiste en que Teherán es en existencia el blanco de los ciberataques y afirma que Teherán utiliza sus capacidades cibernéticas para la defensa y para dirigir respuestas proporcionadas a los ataques que enfrenta Irán.