Un llamado para afrontar el difícil panorama del sector, generado por las decisiones del Gobierno Doméstico, lanzó ayer la Cámara Colombiana de la Construcción, Camacol. Esto correcto a la reducción en la disponibilidad de subsidios y las recientes medidas arancelarias adoptadas que, según la entidad agrupado, ponen en jugada la capacidad del sector para producir vivienda de interés social y afecta la demanda de los hogares de menores ingresos.
Guillermo Herrera, presidente de Camacol, indicó que el ritmo de inicios de obra podría ubicarse por debajo de las 55 mil viviendas sociales en 2025, un nivel cercano al que se observó entre 2010 y 2011. Esos menores ritmos de obra se traducirían en la pérdida de 200 mil puestos de trabajo durante 2025.
“Llevamos tres meses liderando la pérdida de empleo a nivel franquista. Desde julio de 2023 el Gobierno Doméstico viene anunciando una política de recuperación económica para impulsar el crecimiento del país. No obstante, transcurrido más de un año, dicho plan no ha sido implementado y, por el contrario, las políticas públicas adoptadas podrían disipar los esfuerzos que desde el sector privado se vienen realizando”, advirtió.