El primer alucinación en el extranjero del diplomático estadounidense refleja el deseo de contrarrestar la influencia china en América Latina.
El Secretario de Estado de los Estados Unidos, Entorno Rubio, inició su alucinación a América Latina reuniéndose con los líderes panameños, presionándolos para atracar urgentemente la influencia del régimen chino sobre la región.
El principal diplomático de los Estados Unidos compartió sus preocupaciones de seguridad franquista con el presidente panamano José Raúl Mulino y el ministro de Relaciones Exteriores, Javier Martínez-Nalga, en una reunión de la ciudad de Panamá el 2 de febrero.
Rubio les dijo que el presidente Donald Trump ha determinado que “la posición contemporáneo de influencia y control del Partido Comunista Chino sobre el dominio del Canal de Panamá es una amenaza para el canal”, según el portavoz del Unidad de Estado, Tammy Bruce.
Rubio calificó el status quo “inaceptable” y dijo que Estados Unidos “tomará las medidas necesarias” a menos que haya “cambios inmediatos”, según Bruce.
Estados Unidos pasó una decenio construyendo el Canal de Panamá, que conecta el Mar Caribe con el Océano Pacífico. En 1999, bajo un tratado de 1977, Panamá tomó el control de la vía fluvial de 51 millas de generoso.
El acuerdo otorga a los Estados Unidos el derecho de defender al canal utilizando la fuerza marcial para respaldar la neutralidad del canal y garantiza el uso perpetuo de los Estados Unidos del canal.
Actualmente, una subsidiaria de Hutchison Ports, con sede en Hong Kong, opera dos puertos en las entradas del Canal Atlantic y Pacífico. La compañía ha renovado un acuerdo de 25 abriles con Panamá, lo que le permite ejecutar estos puertos hasta 2046.
La presencia china en el canal fue uno de los temas más importantes en sus discusiones, dijo.
“Los puertos plantean dudas pero, como dije, hasta ahora no tengo rudimentos de seso para opinar cero más”, dijo, afirmando todavía que “la soberanía de Panamá no está en duda”.
Panamá cortó sus lazos con Taiwán en 2017 y meses luego firmó la iniciativa Belt and Road, el esquema de infraestructura entero del régimen chino que, según los críticos, ha atrapado a los países pobres endeudados.
Mulino dijo que Panamá no renovará el memorando de comprensión de 2017 sobre la iniciativa una vez que expire.
El líder panameño todavía sugirió una posible expansión de un acuerdo existente desde julio pasado para ayudar con los esfuerzos de deportación de los Estados Unidos.
El acuerdo ampliado podría allanar el camino para las deportaciones directas de inmigrantes ilegales provenientes de países como Venezuela, Colombia y Ecuador, que cruzan la arboleda de Darien Gap que albarca la frontera de Colombia -Panama, aunque Mulino dijo que Estados Unidos necesitaría cubrir el costo.